70%

Descuentos

For Books Of March

Ingresar código de promoción

PXC2019

How-to-track-your-traveling-speed-with-Android-Phone-1

Acelera tu android [Tutorial]

¿Tu SMARTPHONE Android esta lento?

Te tratemos este TUTORIAL para optimizar Android, de forma que, siguiendo estos sencillos pasos podremos aumentar la velocidad de Android y también mejorar la duración de la batería, haciendo que dure más tiempo al consumir menos carga.

Todo esto lo podemos lograr sin demasiado esfuerzo siguiendo ésta magnífica guía que contiene los 10 mejores trucos para optimizar Android. Algunos tienen que ver simplemente con el uso adecuado que le hemos de dar al terminal, y otros con la instalación de algunas aplicaciones Android que realicen un trabajo de optimización de éstos.

Antes de nada, comentar que las aplicaciones son completamente gratuitas, y están disponibles en

para descargar e instalar en cualquier momento.

1. Evitar uso de widgets innecesarios

Este conesejo es bastante evidente, y además, como es obvio, está bastante extendido, pero nunca está de más citarlo, ya que es muy influyente en lo relativo, tanto al ahorro de la batería como a la fluidez de nuestro sistema operativo.

Elabora unas determinadas preferencias, y coloca en tu escritorio widgets que necesites para realizar determinadas tareas que realices con asiduidad. Por supuesto no estamos diciendo que prescindamos del uso de widgets, ya que son extremadamente útiles para llevar a cabo determinadas acciones mucho más rápido, sino que únicamente saquemos al escritorio los widgets que realmente consideremos necesario, sin realizar un uso excesivo de éstos.

2. Control de la batería y la energía

Es necesario controlar la batería que tenemos en un determinado momento para optimizar Android correctamente y tener en cuenta cuándo volveremos a tener a mano nuestro cargador, para saber si tenemos que realizar o no un ahorro intensivo de batería. Como consejo a mayores, recomiendo, si vamos a pasar varios días sin poder cargar el teléfono, dejarlo cuándo no lo estemos usando, en “modo avión”, de esta forma, apenas consumirá batería, y evitamos el gasto de batería que supone el apagarlo y encenderlo continuamente.

Con respecto a controlar la energía, nuestra máxima será siempre el desactivar todo lo que no se esté usando en ese momento, y más concretamente, hablando del tema de conexiones, que es lo que más consume.

Con esto nos referimos a que, por norma, no se deben tener activados ni Bluetooth ni GPS, por ejemplo. Podemos descargar e instalar una aplicación para controlar la energía, Greenify es de esas aplicaciones que realmente ahorran batería. Funciona congelando aplicaciones para que no se ejecuten en segundo plano. Es muy diferente de solo cerrarlas ya que con Greenify no se abren hasta que ejecutes manualmente la aplicación. Puedes crear listas de apps a congelar, a proteger… Funciona sin ROOT, aunque esto implica que necesitarás congelar y descongelar manualmente.

3. Controla las aplicaciones “Autorun”

Es más que probable que en tu Android tengas una determinado número de aplicaciones configuradas en “Autorun”, o lo que es lo mismo, que se activen o abran al iniciar el teléfono. De hecho muchas se configuran de esta manera al instalarse.

Esto es bueno en algunas aplicaciones como podrían ser aplicaciones de alarmas, para comprobar el correo, o para actualizar el tiempo. Pero no tiene mucho sentido salvo el de consumir recursos y batería el que se inicien de forma automática, por ejemplo, aplicaciones para decargar vídeos o algún juego. Por eso es útil el tener una aplicación como BetterBatteryStats

No es un aplicación destinada a ahorrar batería, sí una app que te dice en qué se gastan todos los mAh. Su precisión permite calcular hasta los procesos del sistema, lo que te llevará a entender por dónde se fuga tu autonomía. Una vez localizados los puntos negros solo necesitas desinstalar esas aplicaciones o, en la medida de lo posible, deshabilitarlas si las apps son de sistema.

4. Task-Killers ¿Necesarios o no?

Supongo que todos conoceréis los famosos programas “task-killer”, que tienen la función de “matar” o cerrar de golpe, las aplicaciones abiertas que no necesitemos utilizar en ese momento, pero que teóricamente están consumiendo recursos de memoria RAM.

Quizás este, en sistemas operativos de ordenadores hace unos años, como puede ser Windows 98, esto era algo importante, ya que cuanta más memoria RAM libre tenías disponible, todo se movía de forma más rápida y fluída, pero eso ya forma parte del pasado. Ahora mismo, la memoria RAM que no está en uso, es memoria que no estamos utilizando, sin más. Éste modelo esta en uso por sistemas operativos cómo los últimos Windows, Linux y obviamente, en Android.

De esta forma, Android está continuamente utilizando casi el 100% de toda nuestra RAM, tengamos abierta una aplicación o 20. Cuándo abres una nueva y se necsita RAM, se liberan aplicaciones de forma que quede disponible suficiente memoria como para arrancar y funcionar el nuevo proceso.

Una vez sabido esto, podemos decir que el uso de task-killers para optimizar Android no es necesario, pero aún hay más, ya que muchos task-killers automáticos, pueden cerrar sin querer aplicaciones o tareas que tengamos programadas, como pueden ser las alarmas.

Para rematar, los task-killer, al realizar la liberación de aplicaciones, hará uso de un incremento de proceso, de forma que se producirá un gasto innecesario de batería, a cambio de realizar un inútil intento de mantener libre nuestra memoria RAM.

5. Overclocking y underclocking

El hacer overclocking en nuestro sistema operativo, permite incrementar la potencia del procesador del teléfono, a cambio de un incremento en el gasto de batería, y al contrario, el underclocking, hará que nuestra potencia del procesador sea menor, a cambio de un mayor rendimiento de la batería, imprescindible para optimizar Android satisfactoriamente.

Esto se puede realizar con la aplicación de SetCPU, en la que establecemos límites superiores e inferiores de nivel de potencia de procesador.

La aplicación nos permitirá crear varios perfiles, para utilizarlos cuándo la ocasión lo requiera.

6. Control de Aplicaciones

Aunque como explicamos en el punto anterior, el utlizar un task-killer para optimizar Android se trata de una no muy buena idea, hay que realizar un seguimiento y control de las aplicaciones que tenemos activas en todo momento. Existen aplicaciones que consumen muchos recursos de nuestro terminal, hasta el punto de poder llegar a colapsarlo. Por eso se recomienda el uso de una gestor de tareas como es BetterBatteryStats. Este programa, monitoriza los procesos que tenemos abiertos, y además, detecta cuales de éstos sobrepasan un límite de consumo de recursos, dándonos a conocer cuales hemos de tratar de desactivar para una correcta optimización del sistema. No dudes en visitar nuestro nuevo artículo sobre las mejores aplicaciones para optimizar Android.

7. Uso y elección de un Launcher

Launcher para Android.

El lanzador es quizá la app más importante de tu sistema

El rey de los launchers. Pasan los años y sigue siendo una de las mejores opciones. Cada vez que ha habido una gran actualización en Android, ahí han estado para ponerse rápido al día. Triunfaron por ofrecer una experiencia muy ágil y ligera, pero a la vez llena de opciones de todo tipo.

Podemos personalizar cada detalle, cambiar los iconos, modificar la distribución de los iconos, ordenar apps por pestañas en el cajón, usar gestos… A día de hoy sigue siendo el espejo donde cualquier launcher que quiera triunfar debe mirarse. Por ponerle una pega: no es el más espectacular de todos.

8. Conexiones y tipos de redes

Nuestro sistema operativo realiza búsquedas de manera continua de redes con coberturas adecuadas, que, aunque se trate de algo muy útil, reduce la duración de nuestra batería, por lo que es recomendable desactivar o modificar estas opciones en las situaciones que lo requieran, para poder optimizar Android en lo referente a ahorro de batería.

Para controlar esto, hemos de escribir en el teclado numérico en la zona de realizar una llamada de teléfono el siguiente código: *#*#4636#*#* y sin necesidad de darle a llamar, entraremos en un menú llamado “Prueba”. Accedemos a “Información del teléfono”, y abajo del todo hay una pestaña desplegable que nos permite elegir nuestro tipo de red preferido.

El que viene por defecto es la mas rapida, ya sea  WCDMA preferred, (usa 2G y 3G) o LTE (usa 4G), además está siempre buscando la mejor manera de usar 4G (mucho gasto de batería).

  • Red GPRS: el tipo de red más básico y lento, con solo 80 Kbps de velocidad teórica. Solo podremos realizar llamadas y enviar SMS a través de ésta, aunque permite la navegación por Internet a muy bajas velocidades y solo en contadas aplicaciones (WhatsApp, Telegram, Line etc.).
  • Red EDGE: se muestra como la evolución de la red móvil anterior. Con una velocidad máxima de 236 Kbps, supuso una revolución en la época. Algunas aplicaciones más pesadas que las anteriores en cuestión de uso de red pueden ser usadas a través de este tipo de red.
  • Red 3G: pasamos a los tipos de antena UMTS y con éstas, un nuevo tipo de red. La red 3G permite una velocidad teórica máxima de nada más y nada menos que 2 Mbps, destacable sobre todo si las comparamos con las anteriores.
  • Red HSDPA: también llamada 3G+ o 3’5G. Permite una velocidad máxima de 14 Mbps, y hasta hace poco era la panacea para la mayoría de smartphones presentados al mercado.
  • Red HSDPA+: el tipo de red más rapido con antenas UMTS. Sigue siendo veloz a día de hoy y permite velocidades de hasta 84 Mbps de bajada y 22 Mpbs de subida, muy próximas a las obtenidas por las redes 4G.
  • Red 4G: con velocidades teóricas de hasta 150 Mbps de bajada y 50 de subida, se trata de la red móvil más rápida actualmente, a falta de la implantación oficial de las redes 5G en la mayoría de países.
  • Red 5G: aún sigue en fase de pruebas, pero su implementación se espera para 2020.Promete velocidades hábiles de 1 Gbps, superando las obtenidas por la mayoría de lineas ADSL y fibra óptica.

La más adecuada para un uso óptimo de ahorro de batería actualmente, es 3G, que sacrifica en menor medida la cobertura y la velocidad, pero supone un buen ahorro de batería.

9. Establecer los límites de la memoria

Hay varios tipos de procesos a nivel de reparto de memoria RAM en Android, que son las aplicaciones en primer plano (en uso directo), aplicaciones vivibles (aparecen en la esquina superior derecha), servicios (pendientes, esquina superior derecha de la pantalla, como la descarga de una aplicación), procesos en segundo plano (interrupidos, pero que se pueden reanudar) y procesos vacíos (tareas finalizadas, pero que se mantiene en la lista de “Recientes”).

Pues este truco consiste en utilizar la aplicación Autokiller para establecer los límites individuales de memoria que se le otorga a cada categoría.

El objetivo es no tener nunca memoria libre, aprovechando más la RAM de nuestro teléfono evitand oel efecto de “culo de botella”, que se puede producir en casos de terminales con procesadores poco petentes.

10. Gestor para optimizar Android

Para finalizar, es muy recomendable no tener instalado un programa para realizar una gestión, control y limpieza del móvil, para optimizar Android.

Antes de instalar como un loco aplicaciones que limpien la RAM, ¿te has parado en pensar cómo funciona? La memoria RAM, como su propio nombre indica -Random Access Memory-, es un almacenamiento temporal, al que el sistema tiene acceso en todo momento. Se trata de una memoria de trabajo, en la que se carga información relativa a todos los procesos que tiene que gestionar el teléfono.

Si abres WhatsApp, los datos serán enviados a la memoria RAM, y en una apertura posterior de la app, al estar ya cargado el proceso, se abrirá mucho más rápido. Las aplicaciones necesitan funcionar en segundo plano, y aunque no lo creas, esto no aniquila tu batería ni nada por el estilo, ya que el sistema sabe de sobra cómo debe gestionar la RAM. Caso aparte es que la aplicación tenga una optimización nula, en cuyo caso el propio sistema no puede gestionar correctamente los recursos que demanda, y aquí es cuando llegan los problemas.

Android sigue la máxima de “RAM no utilizada, RAM desperdiciada”. Tengas 2, 3 u 8 GB de RAM, más de la mitad de estos gigas siempre estarán ocupados. Android distribuye los procesos para mantener la máxima información posible en la memoria RAM, ya que es la mejor forma que tiene para gestionar el rendimiento del terminal.

El problema es que Android es libre, y los desarrolladores pueden meter la pata haciendo aplicaciones que demandan demasiados recursos. Aplicaciones como, por ejemplo, Facebook, son mucho más demandantes de recursos de lo que deberían. Al exigir tanto al sistema, este debe destinar gran parte de la memoria RAM a procesos como Facebook, y quitarle prioridad a otros que deberían estar activos, pero que se cierran para que la app pueda mantenerse abierta.

Estas inconsistencias son las que crean problemas, pero la forma de arreglarlo no es instalar un limpiador. Lo vas a entender muy fácilmente, cuando comprendas cómo funciona un limpiador, y cuál es su verdadero propósito.

Mediante estos 10 pasos podremos optimizar Android de forma que le sacaremos un mayor partido a este sistema operativo, a la vez que podremos gozar de una duración de la batería mucho mayor.

1 Comment

Deja una respuesta

Main Menu